Crónica de una noche memorable
Como se sabe, Impact de Montreal perdió la final de la Liga de Campeones de la CONCACAF (5-3) ante las Águilas del América. Por lo histórico del momento y la multitudinaria asistencia al evento, decidimos rememorar el clima que se vivió esa legendaria tarde.
MANUEL JARAMILLO
Fue un largo y sinuoso camino para este aguerrido equipo de Montreal. Los bleu-blanc-noir lograron atraer más de 61,000 espectadores a esta final de la liga de campeones de la CONCACAF. Una cifra récord en lo que fue unas de las noches más memorables para el icónico Estadio Olímpico de Montreal, pero sobre todo para la historia de este deporte en Canadá y para los aficionados que nunca escatimaron gritos, algarabías, porras y vestimentas azules.
Por primera vez un equipo de fútbol canadiense lograba ser partícipe de una final y, por si esto fuera poco, regresaba a casa con una ligera ventaja por el previo empate de 1-1 en suelo mexicano contra las Águilas del América.
Recordemos que en este tipo de torneos cada eliminatoria final se juega en dos partidos, uno en casa y uno como visitante y en caso de empate global los goles de visitante suelen ser sumados al doble.
Camino al Olímpico
Resultaba un poco difícil caminar entre la marea humana y el ambiente de fiesta se escuchaba a varias cuadras a la redonda.
Gente que portaba (en su mayoría) los colores del Impact. Otros tantos fanáticos del equipo Azteca con los colores azul y crema. No faltaron los luchadores mexicanos enmascarados tricolores así como tampoco las omnipresentes camisetas de los aficionados de las Chivas a quienes les preguntamos ¿y porque los colores de un equipo tapatío?
“Porque somos mexicanos a mucho orgullo pero no le vamos al América” -nos respondió Raúl con una gran sonrisa-
Tuvimos la oportunidad de tomar la opinión de otros aficionados. Entrevistamos a Hugo y Nathalie de 26 y 21 años respectivamente.
¿Son ustedes aficionados al fútbol?
-Nathalie: yo no, vengo porque a él le gusta y me invitó a venir.
-Hugo: yo compro pases para toda la temporada de la liga MLS, soy de Quebec y siempre me gustó el fútbol y juego en los parques en el verano con los sudamericanos, portugueses, franceses, gente de todo el mundo. A mí me gusta mucho ver a tanta gente reunida por una sola causa.
En el acceso al estadio, Cameron Porter firmaba autógrafos sentado sobre una silla, vestido muy formal, luciendo su protección en la rodilla y un par de muletas.
Nos comentó que se recuperaba normalmente de su lesión. Que se sentía muy optimista en el resultado de esa noche.
Cameron Porter –le preguntamos–¿ que pasa por tu mente hoy y cual es el sentimiento de saber que tú eres en gran parte responsable de que tu equipo juegue hoy esta final?
“Es un sentimiento muy muy especial. Donde quiera que voy y donde quiera que esté, las palabras de la gente y su apoyo.
Quisiera estar jugando hoy, mira cuánta gente está entrando”.
“Mi familia y amigos están hoy por aquí, voy a estar con ellos, va a ser una gran noche”, finalizó.